Fuí hace unos días con mi amiga Mari, quien se encargó de tomar las fotografías que ilustran este post. Estuvimos recorriendo la sala durante algo más de dos horas (!), y podríamos habernos quedado por más tiempo de no ser porque el tiempo apremiaba.
La gran mayoría de las obras expuestas no las había visto antes. Había varias secciones interesantes, como la de las cartas del tarot o los 10 mandamientos, pero la que más me cautivó fue la sección "Los objetos del futuro", por su sinsentido creador que se aproxima a la locura. Vean sino alguna de esas obras de esa sección, con sus delirantes descripciones correspondientes.
Nota: son las únicas fotografías que mi amiga pudo tomar, antes de que venga un tipo de seguridad a prohibirnos seguir tomando fotos.
“Cuando pintaba me ponía azúcar de dátil en la punta del bigote y un poco de miel en la comisura de los labios, y me ponía a esperar el gran momento de babear de satisfacción. De manera que esperaba a que acudiera la mosca, se detuviera en la comisura de la boca entreabierta y penetrase en ella. Cuando la tenía dentro, cerraba la boca y la mosca hacía “Brr…” y la soltaba. Y entonces otra mosca, y otra. ¡Qué cosa tan sibarítica!”